Una de las palabras más utilizadas en nuestros días pero menos entendidas es la Empatía. Esta habilidad, cualidad y competencia cada vez cobra más relevancia en la gestión empresarial y la vida personal.
A mi me gusta siempre poner el ejemplo en mis talleres, cursos o acompañamientos a Directivos y les digo que «la empatía es ponerse en los Zapatos del otro…pero el otro anda descalzo» .
Para que haya empatía debe de existir, sensibilidad, compromiso, involucramiento y capacidad de VER a través de los ojos del otro, respetando la libertad, unicidad e individualidad de esa persona. ¿Para qué? Para que podamos enriquecernos con su visión y reconsiderar la nuestra. Esto sumará siempre a la construcción de relaciones trascendentes y mucho más humanas.
