Reclutamiento como Herramienta de Branding

¿Cuántos de tus colaboradores son embajadores de tu marca? O dicho de otra forma, ¿tienen bien puesta la camiseta? ¿Cuántos trabajadores recomendarían a tu empresa? ¿Cómo crees que ven a tu marca a través del comportamiento de tus colaboradores? ¿Qué imagen tienen los consumidores de la compañía? Para que las respuestas a todas estas preguntas sean positivas, los directivos deben potenciar el employer branding como una estrategia más dentro de la organización.

Muchas empresas en la actualidad confían más en la información sobre las empresas que reciben de los empleados que la que obtienen de los CEO o ejecutivos de la compañía. Sin embargo, está en la mano de los directivos cambiar esta tendencia e integrar acciones de employer branding dentro de su actividad.
 ¿Cómo podemos convertirnos en grandes embajadores de la marca? Las siguientes acciones ayudarán a los ejecutivos a mejorar la imagen de marca:

  • Conocer a fondo la compañía. Para realizar un correcto employer branding, los directivos tenemos que saber hasta el más mínimo detalle de la organización que gestionamos, desde las previsiones de crecimiento a largo plazo, hasta el precio de los artículos o el proceso de fabricación, para evitar quedar en evidencia ante preguntas concretas.
  • Mostrar nuestra satisfacción por pertenecer a la empresa.  Si queremos mejorar la reputación de la entidad es necesario vivir con responsabilidad y compromiso;  exteriorizar nuestro compromiso con la misma y con sus valores con todos los integrantes de nuestra agenda de contactos
  • Actuar en consecuencia. Además de difundir, de forma física o digital, nuestro vínculo con la organización, las palabras deben convertirse en hechos. No podemos conversar con un inversionista  sobre lo importantes que son los empleados para la compañía y tratar de forma  inadecuada al personal interno  o responder de la manera errónea a algún comentario que remarque algún error en el servicio al cliente. 
  • Representar a la compañía las 24 horas. Los ejecutivos lo son a tiempo completo; aunque  es posible delimitar entre su “yo” personal y su “yo” profesional, es importante  evitar  realizar comportamientos o comentarios que afecten negativamente a la imagen de marca
  • Trabajar las relaciones y comunicación personal. ¿Qué sentido tiene poner música en una habitación vacía? Para llegar al máximo número de personas posibles, los directivos no pueden aislarse en su despacho, sino que tienen que fomentar la interacción con los diferentes grupos de interés para dar a conocer qué, cómo y por qué trabaja la empresa.
  • Hacer buen uso y potenciar las redes sociales. Según el informe ‘Redes sociales y mercado de trabajo’, de Adecco, el 80% de los profesionales considera muy relevante el contenido que la empresa comparte en las redes sociales a la hora de elegir un lugar para el que trabajar.